En otra noche de alto vuelo artístico, el público acompañó y disfrutó de las presentaciones de Chacho Echenique y Angela Irene y de los debuts de Aromo y Sergio Zabala.
El ensamble vocal producto del taller dirigido por Manu Navarro, abrió la segunda noche del Encuentro. El grupo preparó y cantó la guarania Sin saber por qué y la zamba Sapo cancionero. “Es un honor poder estar en este encuentro, bastión de la cultura nuestra”, expresó Navarro.
Marcelo Stenta dirigió el ensamble de guitarras de su taller Orquesta de guitarras taller, diseñado en homenaje a Yupanqui. Los ejes de mi carreta, Luna tucumana (con Jorgelina Sorrequieta como cantante invitada) y el gato El tulumbano, fueron las elegidas para la muestra. El guitarrista, que integró muchos años la organización del Encuentro, además de dirigir el ensamble, apoyó rítmicamente tocando el bombo. “Hay que aplaudirlos de pie, porque hacen un gran esfuerzo”, dijo refiriéndose al equipo del Encuentro.
Sergio Zabala. Fotos: Jéssica Córdoba
El sanluiseño Sergio Zabala mostró sus canciones en su primera visita a Rosario. Con Valle de Conlara y Deseos de tonada, el virtuoso guitarrista y cantor inició un exquisito set de obras propias. Dedicó La guitarrera a las cantoras de hoy y de siempre y pidió palmas al público que acompañó el tema en donde el autor nombra a Alfonso y Zavala, referentes insoslayables de la música cuyana. El artista se manifestó “emocionado, afortunado y agradecido por compartir con estos grandes de esta noche y gracias por continuar esto pese a las dificultades”. En el cierre cantó Jazmín otoñal, vals romántico que compuso con Alejandro Szwarcman, con un fragmento cantado a capella.
La presencia de Angela Irene en el Encuentro significó un reconocimiento a su historia. Acompañada de modo brillante por el guitarrista Manu Navarro, la cantora de General Pico ofreció un puñado de canciones de su cuidado repertorio. Incluyó su versión de Solo luz, una de las tantas obras que Raúl Carnota le fue acercando. La cantora resaltó la importancia de la existencia de los cantores y destacó a Navarro por su labor como guitarrista, arreglador y director de Santaires. A su tierra pampeana dedicó Huella de ida y vuelta. Luego decidió homenajear a Ariel Ramírez, uno de sus mentores. “Es un santafesino ilustre. Gracias a él, he pisado los escenarios más importantes del mundo”, dijo recordando los primeros apoyos del pianista argentino. “De mi poeta preferido, Armando Tejada Gómez, es la letra de este tema que cantaré toda mi vida”, dijo presentando Volveré siempre a San Juan, la zamba creada por Tejada y Ramírez. Se despidió con Chacarera del barro, pero antes dijo agradecida “qué bueno es sentirse mimado por los pares, que te atiendan quienes saben qué necesita un artista es maravilloso”.
Angela Irene y Manu Navarro. Fotos: Jéssica Córdoba
En la pausa se pudo ver en pantalla el saludo de Juan Carlos Baglietto. “Orgulloso de haber sido parte. El Encuentro le hace muy bien a la cultura y a Rosario”, dijo el cantor en su mensaje, felicitando a los músicos organizadores.
El trío Aromo basó su participación artística en la obra poética de Isabel Cascallares Gutiérrez, que en sus poemas respeta la fonética de los chuncanos. “Estamos con el corazón inflado de tanto cariño, es un sueño para nosotros estar acá”, expresó Diego Cortez, cantante y vientista del grupo. El trío invitó a Martín Neri que se sumó a la versión de la chacarera Mi´Ais Ver. Con originales arreglos vocales e instrumentales, incluyeron canciones del disco El ricuerdo, con letras extraídas de Poemas serranos (1928), el libro que Isabel le dedicó a Mina Clavero.
Chacho Echenique fue presentado con un fragmento de Gente necesaria, el poema de Hamlet Lima Quintana. Su voz ya es patrimonio cultural de los argentinos. Chacho vivió intensamente estos primeros días del Encuentro. “Estuve escuchando ayer y hoy y veo lo importante que es compartir y estar presente”, dijo en el saludo. Luego de un breve inicio solista, convocó al escenario a Martín Neri, “un duende” lo definió Chacho. Con Neri en guitarra, sumó al público en la interpretación de Doña Ubenza, un clásico del repertorio del Dúo Salteño y, en el final del tema, artistas y público se aplaudieron mutuamente.
Chacho Echenique junto a Martín Neri. Fotos: Jéssica Córdoba
En la segunda parte del recital, decidió tributar al Cuchi Leguizamón y al dúo recordando aquellos tiempos y contando anécdotas con su creador. “¡Tenés que hacer bien el contrapunto, Patricio!”, recordó que dijo el Cuchi. “Fue un compositor maravilloso, auténtico y sincero”, definió. “¿Querés que le hagamos un homenaje a Patricio Jiménez?”, le preguntó a Martín. A dos voces, juntos recordaron Maturana, Juan panadero y La alejada, recibiendo una ovación en el final. Chacho Echenique fue declarado “visitante distinguido de Rosario” por el Concejo Municipal, proyecto que fue presentado por el bloque Ciudad Futura y que fue aprobado por unanimidad . En el escenario se le entregó copia del decreto que así lo certifica. “Para ellos (El Encuentro) debe ser el aplauso. Me comprometo, mientras viva, a estar acá”, expresó sincero y agradecido.
La programación artística de la segunda noche del Encuentro ofreció otra serie de visitas de intérpretes que certifican la vigencia de los referentes y garantizan la continuidad de la historia de la música argentina, que está en buenas manos como lo demuestran los artistas elegidos para esta edición.