2 Febrero 2016 / 8:35 / Lt3
La noche palpitaba un festejo, el Escenario Atahualpa Yupanqui estaba preparado para ello, habían pasado 20 años desde la presentación de Soledad Pastorutti en el Festival Mayor del Folklore, nadie se lo quería perder, siendo la noche con mayor concurrencia en lo que va del Festival, el tifón de Arequito demostró su vigencia y consolidación como artista consagrada del folklore argentino. Como es tradicional la velada dio inicia con la arenga y el Himno a Cosquín, precedido por los fuegos artificiales, y el Ballet Cámin presentó nuevamente la puesta del “Bicentenario de la Independencia”.
La apertura musical estuvo a cargo de Horacio Banegas, representante de la canción santiagueña, autor y defensor de la cultura nativa, quien actuó junto a sus hijos, regresando al escenario coscoíno luego de no estar en la edición pasada con chacareras, canciones nuevas y una renovada versión del huayno “Canción del quenero”, siendo aplaudido fervorosamente por el publico de la Plaza Prospero Molina. El inicio de la noche no podía pedir más.
Luego vendría el turno de la música del litoral, hasta ahora gran ausente en Cosquín, en una especie de entrevista realizada por Rony Vargas, titulada “Cosquin canta y cuenta”, donde los entrevistado eran el Padre Julián Zini (recitador) y el reconocido autor chamamecero Mario Boffil, representantes de la provincia de Corrientes, quienes hicieron recitados y clásicos de su autoria, quedando opacada la entrevista del conductor invitado por la baja calidad de sonido de la presentación.
Prosiguió la noche con Abi Gonzalez y posteriormente la delegación de la provincia de Chubut, con una gran muestra de la riqueza e historia de la provincia patagónica, pintando la postal del sur tanto en la danza como en la música, espectáculo de calidad y muy bien diagramado.
Llego el turno de Los Carabajal, con toda su impronta santiagueña, su historia, sus chacareras, que alegraron al público e hicieron vibrar a la gente. No hace falta decir más nada.
Una nueva propuesta arribo a Cosquín, en horario central, defensores de la canción social y originaria, hace muchos años que vienen con su idea y línea estética, el grupo bonaerense Che Joven, excelentes artistas y autores, los hermanos Pablo y Marino Coliqueo, quienes tuvieron como invitados a Bruno Arias y Rubén Patagonia. Calidad instrumental y vocal para una invitación a la reflexión sobre los pueblos originarios y el reclamo popular.
Nuestra región litoraleña se vio plasmada en la voz de María Elena Sosa, cantora santafesina, quien actuó junto a Franco Giaquinto y Marcos Pereyra de la ciudad de Victoria, Entre Ríos.
Sobre el final llegaron los momentos más intensos de la noche, el festejo de Soledad Pastorutti junto a sus invitados: Jorge Rojas, los Manseros Santiagueños, los Tekis, Luciano Pereyra, el Chaqueño Palavecino, Abel Pintos, los Alonsitos, Facundo Saravia, Marite Berbel, Orlando Veracruz, Julián Ratti, los Nocheros y los Cuatro de Córdoba entre otros, con una plaza colmada donde no cabía un alfiler, la sole fue el broche de oro de la noche, culminando su actuación a las 4:15 am luego de 2 horas de música, cantando todos juntos la tradicional zamba “Luna Tucumana”, en una noche que quedara en la memoria colectiva del Festival y del folklore argentino.
Marcelo F. Muiños| Para LT3 AM680
Producción: LT3 y De Coplas y Viajeros
Fotografía: Cintia Kluczkiewicz