Por Pedro Squillaci | pedrosquillaci@yahoo.com.ar
Ilustración: Enrique Figna
– Hola Juan, ¿cómo andás, genio? Te llamo para armar el programa de hoy, ¿todo bien?
– Sí, todo bien, Zampa, ¿viste a Tinelli anoche?
– Sí, vi algo, no todo, muy largo, viste…
– Como puteada de tartamudo, sí, larguísimo.
– Che, venís re moderno con las frases, falta que digas «Como turco en la neblina», «Como maleta de loco», «Como perro con dos colas» y hacemos la lista eterna de las frases hechas.
– «Buenas noches, América».
– Buenas noches, pero es de día, ¿qué te pasa, calabaza?
– No, bolu, tenés menos reacción que una tortuga, digo que «Buenas noches, América» ya es una frase que se instaló en el ciclo de Tinelli . Y es como una marca registrada del tipo.
– Sí, no tan registrada.
– Sí, sí, la tiene patentada ya.
– No, Juan, qué patentada. Cuando la quiso registrar le saltó a la yugular el canal América y no pudieron hacer nada, parece que le metieron una orden judicial y al tipo no le quedó otra que no registrarla, aunque la siguió usando igual.
– Igual que el tema de los protocolos, le clavaron dos causas judiciales y sigue haciendo un programa con 200 personas en el estudio, lo sigue haciendo igual.
– Bueno, también es cierto que hay cosas que las graba diferidas para evitar que se junte la gente y que se hacen no sé cuántos hisopados. Eso también hay que decirlo, che.
– Sí, lo podríamos hacer en el programa de esta noche eso, y contar que tan mal no viene un poco de alegría con algunos sketches y por ahí hay algunas performances de baile y destreza que están buenas, no todo es taaaaaaaaaaaaan condenable, che.
– Sí, yo en el primer programa me reí mucho con Diego Pérez en El insoportable, pero después se me hicieron insoportables algunas devoluciones del jurado. Y además todo el coqueteo, el culto al cuerpo de uno de los participantes, la Jimena Barón que se hace la amante doncella, qué se yo. Bah, cosas del programa. Che, ¿te parece que hacemos un especial con la música del programa?
– Twist and Shout, el clásico de los Beatles es la música del programa.
– Si Lennon volviera a vivir y supiera que el mismo tipo que se metía un alfajor en la boca y que se hartó de burlarse de la gente en cámara y cortaba polleritas al aire ya hace más de treinta años que tiene como cortina un tema clave de los Cuatro de Liverpool creo que se vuelve a la tumba.
– Otra frase hecha.
– Bueno, no tanto, pero sí, se escucha habitualmente eso de que si se entera de esto se muere muerto o algo así. Es que vivimos de frases hechas, todas las frases están hechas, en definitiva.
– Quizá sea el momento de hacer nuevas frases de hoy que serán las frases hechas de mañana…
– Vos tenés que ponerte una escuela, Juan, qué tipo lúcido, che.
– Lucido, no lúcido, en mi caso, lo de la escuela es otra frase de un programa cómico, pero no viene ahora al caso, ni me acuerdo.
– Sí, ya nadie se acuerda de los programas cómicos.
– ¿Dónde quedó el humor, no?
– El humor hay que buscarlo en cada uno, y ponerle buen humor a cada cosa que hacemos, no lo podemos buscar en un programa de tevé o en una serie o una peli, si vienen por ahí, mejor, pero la onda, la manera de ver la vida con una sonrisa tiene que partir de uno, aunque esta pandemia del tujes te ahogue y aunque uno vea que «las penas son de nosotros y las vaquitas son ajenas».
– Me dejaste de cara, Zampita.
– Bien ahí, esa es una frase moderna, ¿ves?
Juan y el Zampita se mandaron la típica puteada amistosa de despedida y cortaron la comunicación tosiendo de tanta risa. Ahí los dos se dieron cuenta que por hablar de las frases hechas, de Tinelli, de «Buenas noches, América» y de la búsqueda del humor no terminaron de abrochar de qué se iba a tratar el programa de la noche. La siguieron por mensajito, sticker va, emoji viene, y después de varios mensajes de audio le dieron un cierre al programa. «Listo el pollo», le escribió Juan en el último Whatsapp y el Zampa le puso como veinte caritas de carcajadas.