Se cumplen 100 años del natalicio del gran cantor popular, Horacio Guarany. Durante su prolífica carrera se desarrolló como músico y compositor, retratando paisajes y personajes de manera entrañable; escribió varios libros y trabajó como actor y conductor de televisión, siempre abonando a la cultura argentina. Falleció a los 91 años en 2017.


Este 15 de Mayo, el mundo de la música popular argentina celebra los cien años del nacimiento de «El potro». Con su prolífica pluma, Horacio Guarany ha aportado importantes obras al cancionero nacional y dejó un legado imborrable para las nuevas generaciones de folkloristas.

Eraclio Catalín Rodríguez (Horacio Guarany) era hijo de un indio guaraní correntino y una inmigrante española. La familia vivía en el norte de Santa Fe, el padre de Horacio era obrero de La Forestal. Nacido en el monte el 15 de mayo de 1925 y anotado en Las Garzas,  Heraclio Catalín (Horacio) fue el decimosegundo de los catorce hijos del matrimonio Rodríguez-Cereijo (seis varones y ocho mujeres).

En 1985 recibió el Premio Konex de Platino como el cantante masculino de folklore más importante de la historia en Argentina. Foto: Eduardo Fisicaro

En los años treinta, cuando la familia residía en Lanteri, la madre de Horacio decide mudarse a Santa Fe con parte de sus hijos, entre ellos Horacio. Se instalaron en Alto Verde, la isla que Guarany describe en la zamba  “La litoreña”.

Santiago Aicardi fue su primer maestro de guitarra. Los primeros indicios de que Horacio pintaba para cantor aparecieron en su adolescencia, impactado por la figura y las canciones de Gardel.  Escuchaba tangos por la radio y cantaba en los actos de fin de año en la escuela, esos fueron sus primeros acercamientos a la música. El sueño de Guarany era irse a Buenos Aires con el objetivo de ser cantor de tangos. Pudo viajar a la capital, pero su primera grabación no fue para publicar un disco. En esa época, en el Correo Argentino se podían grabar y enviar saludos para Navidad, así fue que Horacio le mandó a su madre un tango con un saludo inicial de presentación.

Los primeros tiempos en Buenos Aires fueron duros, atravesado por la soledad y la falta de recursos, pero con los sueños de cantor intactos. Empezó a cantar tangos y milongas en los bodegones de La Boca. Más adelante, le llegaría la primera gran oportunidad cuando Herminio Giménez, exiliado en la Argentina, le propone a Horacio ser el cantor de su orquesta de música paraguaya. Tenía 24 años y cantaba en guaraní con el nombre artístico Horacio Rodríguez. Poco tiempo después, junto al pianista Rubén Durán armó el grupo “Los Amerindios”, etapa previa a su lanzamiento definitivo como solista.

A los 20 años, recién salido del servicio militar, estando embarcado como marinero, Guarany se hizo peronista, incluso fue miembro fundador de una Unidad Básica en La Boca. Después de la caída de Perón, el músico paraguayo José Asunción Flores, ex compañero en la orquesta de Herminio Giménez, le cuenta las bondades del comunismo en Paraguay y lo convence de adherir a la idea. En 1956, en la casa de «Poroto» Botana, dueño del diario Crítica y militante comunista, se hizo la fiesta de casamiento de Horacio.

El contexto de pobreza que le tocó vivir en su infancia lo “formateó” rebelde, gran parte de su obra remite a esos tiempos, le ha escrito de modo empático al indio, al hachero, al pobre, al obrero. Además, en 1964 seleccionó y musicalizó fragmentos del Martín Fierro, dejando allí también su impronta de decidor de verdades.

A fines de la década del 50 se publicaron sus primeros discos: “Canta Horacio Guarany” (1957), “Folklore de gala” (1958) y “Horacio Guarany” (1958).  En esos primeros discos, editados por Record SRL, Guarany comenzó a dar rodaje a sus creaciones: “La litoreña”, “Guitarra de medianoche” , “Chacarereando” , “Regalito”, “Zamba del soldado”, “Coplas del pobre”, “Del pescado” y “Quebrachalera” fueron obras propias que convivieron en esos discos con sus versiones de temas populares de otros colegas autores.

En 1957, el primer disco, grabado en un estudio de Radio Splendid, y la cercanía con la militancia del comunismo en Argentina, le abrieron la puerta para ser invitado a formar parte de una delegación al Festival Mundial de la Juventud y los Estudiantes de Moscú en donde por primera vez cantó sus canciones ante una multitud en un evento en el que también estuvieron Los Fronterizos y Ariel Ramírez. El periplo europeo duró seis meses.

Los 50 eran aún años de oro para la radio. Guarany debutó en 1958 en Radio Belgrano y cantó durante un ciclo de tres meses cuando “Guitarra de medianoche” ya era un éxito.  En 1961 comenzó su extenso vínculo con el sello Philips con el disco que también se denominó “Horacio Guarany”, placa que contenía la cueca “La guerrillera”, entre otras.

Su trascendencia lo hizo popular en otros países. Grabó cuatro discos en el exterior, el primero en Radio Moscú en 1957 en Rusia, luego dos en España (1975) y el último en Paraguay en 2002. “Luche luche”, uno de los dos editados en España, también se publicó en Israel y el disco permanece  inédito en Argentina.

Dentro de su incansable labor, también fueron relevantes sus intervenciones cinematográficas.  Como cantor y actor, participó en “Argentinísima” (1972), “Si se calla el cantor” (1973), “La vuelta de Martín Fierro” (1974) y “El grito en la sangre” (2014). En el documental “Nelly Omar, cantora nacional”(2014), Guarany tiene una participación como entrevistado. Si bien nunca llegaron a Argentina y se desconocen, también participó en dos películas en Rusia durante su estada en aquel festival. Frente a las cámaras, también tuvo rol destacado en la televisión conduciendo el programa “Desde el corazón de la tierra”, por Canal 7, en 1961, con guiones de Jaime Dávalos. En el mismo canal, en 2002, Horacio condujo “Los cantores del camino”.

Si se calla en cantor, Pescador y guitarrero y Del Chúcaro, son algunos de sus temas clásicos.

En la década del noventa se inicia su recorrido como escritor con la publicación de la novela “El loco de la guerra”(1992).  En total publicó cinco novelas, un cancionero con sus comentarios y el imperdible “Memorias del cantor, casi una biografía” (2002).

Guarany fue protagonista fundamental de los momentos fundacionales de festivales importantes, como Baradero y Cosquín. No sólo cantó en la primera edición del “festival mayor de América” en 1961, sino que fue uno de los impulsores del encuentro. Para la edición de 1963 (tercer festival), Horacio fue quien recomendó a la comisión la contratación de Julio Mahárbiz, quien finalmente debutó ese año como animador. Al año siguiente, en un disco simple, le dedicó al festival el tema “La cosquinera”. En tiempos de exilio, luego de 1973, estuvo ausente de Cosquín durante doce años. Su regreso en 1985 fue uno de los sucesos más relevantes de la historia del festival.

Entre otras canciones de su repertorio, “Coplera del prisionero” y “El orejano” encendían al público y en 1967 lo comenzó a acosar la censura. En 1974,  figuraba en una lista de la Triple A junto a Norman Briski, Nacha Guevara, Héctor Alterio y Luis Brandoni y es ahí donde se produce su salida del país. El primer destino fue Venezuela, luego México y finalmente España. En el país ibérico, residió en Madrid y por último en Castro Urdiales. Su entereza y su generosidad  lo mostraron solidario con los compatriotas que llegaban a exiliarse. Su regreso a la Argentina se produjo en diciembre de 1978 y comenzó a hacer sus primeras actuaciones en pueblos pequeños del interior del país, con la idea de no estar en el radar de la dictadura militar.

En 1993 firmó con EMI Odeón y debutó en el sello con “Cantor”, un disco que contiene once temas propios y una versión del tango “Esclavas blancas” (Horacio Pettorossi). En este trabajo, Guarany dedica gran parte del repertorio a  su lugar de residencia (Plumas Verdes, Luján), incluyendo “Romance de Plumas Verdes” y la milonga “Yo tengo un amigo nuevo”, entre otras.

“Cantor de cantores” (2003) fue el último disco con canciones originales, el cual inicia con “Carta abierta al río Salado” , el chamamé que relata la tragedia provocada ese año por las inundaciones en Santa Fe. Como siempre en su historia como autor, en su obra, Guarany dejó testimonio de sus opiniones y de su cosmovisión.

En 2007, sin contar las posteriores recopilaciones, se publicó lo último de Horacio:  “Con mis amigos”. El disco reúne sus encuentros con Mercedes Sosa, Soledad, El Chaqueño, César Isella y otros colegas cantores de diversas épocas. Y, en 2012, su colaboración con Luciano Pereyra en “Te digo adiós”, significó el último paso de Horacio por un estudio de grabación.

Si bien «El potro» recibió gran cantidad de premios, no le gustaban los homenajes. Fue y sigue siendo reconocido de modo unánime por la magnitud de su obra y por su compromiso con los más humildes. Los cantores de las generaciones posteriores a la suya siguen interpretando sus canciones demostrando la vigencia de su prolífica obra y su figura sigue siendo un ejemplo de lucha.  Fue, sin dudas, el cantor del pueblo.

Horacio Guarany falleció en Luján el 13 de enero de 2017. Tenía 91 años.

 

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