En esta oportunidad desde la columna Las raíces del canto nos introducimos en el mundo del arpa y su influencia en el folklore de Santiago del Estero. Pareciera que solo se trata de historia sin embargo es un instrumento que está vigente, con escuelas y eventos donde participan jóvenes ejecutantes del arpa, revitalizando aquellas antiguas formaciones musicales, tocando una zamba o una chacarera en la melodía de un arpa.

Para ello nos propusimos investigar el legado que dejó Isabel Neirot, quién fuera una docente y arpista santiagueña, fallecida el año pasado 2020. Defensora del arpa como instrumento folclórico regional, diferenciándolo del arpa estilo paraguayo, supo tocar en festivales, fundar escuelas y concretar el Encuentro Mishquila de Arpas, auspiciado por la Secretaria de Cultura de Santiago del Estero. Hoy siguen con la causa sus hijos y su esposo.

Isabel Neirot. Fotos: Gentileza Omar Ponce Maidana

En las canciones del folklore santiagueño existen numerosas letras que hablan de la presencia del arpa. En la chacarera Fiesta en Atamishqui de Bartolomé Peralta dice “Paisanos de Salavina estaban rodeando el patio: arpa, caja, bombo y violín tocaban desde hace rato”; los Hermanos Abalos cantaban en la Zamba de mi pago, “Un violín gemidor junto a un bombo legüero y un viejo arpero nostalgias me traen de ‘ande soy”.

Con arpa, violín y bombo, en coplas están tendidos, dejándole su oración, a Manuel Gómez Carrillo” dice la zamba A Manuel Gómez Carrillo, quien fuera un destacado recopilador y también rescata la presencia del arpa en el folklore regional de su provincia.

Atahualpa Yupanqui en su libro El canto del viento, relata la existencia de arpistas en Salavina cuando se reunía con Benicio Díaz, luego en sus versos “Y cantaban las piedras en el río” del mismo libro afirma: “Y cantaban las piedras en el río. En el arpa dorada de la tarde guardé mi copla de guijarro antiguo. Vino la noche al fin, distinta en cada uno, para el caballo, para el aire, la piedra y el camino”.

Rubén Pérez Bugallo, quién fuera un reconocido antropólogo, etnomusicólogo e investigador del folklore argentino, rescata en su publicación Catálogo Ilustrado de Instrumentos Musicales Argentinos que el arpa en Santiago del Estero y Tucumán vino por el Alto Perú con los Jesuitas y que se utilizaba inicialmente para acompañar los oficios religiosos. En Santiago del Estero se usaba el recurso de cajonear el arpa, que consistía en que un colaborador del arpero toca con sus manos un acompañamiento percusivo en la caja del cordófono.

Alberto Abecasis en su obra La chacarera bien mensurada habla sobre las influencias a la hora de realizar la música de la chacarera, refiriéndose a Andrés Chazarreta y afirma que estaba influenciado principalmente por la técnica del arpa como la ejecutaban Domingo Aguirre y Baltazar Gallardo (ambos arpistas ciegos).

Hablamos con Omar Ponce Maidana, esposo de Isabel Neirot, organizador el Encuentro Misquila de Arpas (podríamos decir «dulzura de arpas» en su origen quichua), quién nos aportó su conocimiento para escrudiar más sobre el arpa en Santiago del Estero y su actualidad. “Desde el principio el arpa ha estado muy arraigada en el folklore santiagueño, podrás ver algunas letras del cancionero popular santiagueño que nombran al arpa “un ciego al arpa” decía, la mayoría de los primeros arpistas eran ciegos como Aguirre, Baltazar Gallardo. Al principio de siglo me acuerdo lo que nos comentó Vitillo Abalos: había 9 arpistas que los tenían anotados en la ciudad, además había en Loreto en Sumampa estaba La Yuti, era famosa. Se dice que la zamba La 7 de abril la hizo un arpista tucumano”.

Omar nos comparte el anecdotario del Encuentro Mishquila de Arpas, donde se hacen estudios sobre el arpa, se trata de un material escrito muy interesante. Por ejemplo se narra respecto de las distintas formas del instrumento como el Arpa de Pedales, Arpa Viola, Arpa Violín y Arpa Cromática. Además el texto realiza una semblanza de Baltazar Gallardo, maestro arpista, fundamental en esta historia. A principios de siglo “En Santiago del Estero solo existían 1 o 5 arpas cromáticas con doble hilera de cuerdas que fueron construidas por el maestro Gallardo” dice el texto citado.

Mishquila de Arpas, 2019. Fotos: Gentileza Omar Ponce Maidana

– ¿Quienes fueron los pioneros del arpa que se conocen en Santiago del Estero?

Baltazar Gallardo era ciego arpista y luthier de arpa, hizo una de doble encordado. Andrés Chazarreta tuvo arpistas en su orquesta, al Ciego Aguirre, Gumersindo Gorosito y Baltazar Gallardo. El hijo de Gumersindo Gorosito, Alberto, es el que le enseñó a Isabel Neirot. Ella viene de la escuela de los arperos de Santiago del Estero, del NOA, distinto a la escuela paraguaya, formas de tocar distinta. Ella aprendió de las técnicas de los viejos arperos. Baltazar Gallardo le dio algunos secretos.

– ¿Cómo empezó su esposa Isabel Neirot con el arpa?

– En su niñez tocaba y participó en el Festival Laborde, Festival de Olavarría. Después dejó un poco el arpa, no había mucha motivación en Santiago respecto de la difusión, pero en el año 2005 asciende otro gobierno y ahí se hace una apertura a la parte folclórica, surgió la idea de unir a sus alumnas, y empezó a buscar a sus maestros como Walter Morato, y ahí se armó el Encuentro y Movimiento Mishquila de Arpas, primer encuentro latinoamericano, no es un festival, los arpistas vienen y se encuentran. Se hizo uno en Rosario con Ariel Barrios. A través del Mishquila la gente volvió a relacionarse con el arpa y lo que se hacía con ella en diferentes músicas. Isabel presenta el proyecto en Cultura de la Provincia de Santiago del Estero en forma conjunto con el nieto de Andrés Chazarreta, del mismo nombre, era Director del Museo Antropológico, así nace la “Escuela de Arpa “Baltazar Gallardo”. Con eso se buscó que no se pierda el estilo santiagueño del arpa. Mis hijos están a cargo actualmente de la Escuela, continuando con la vocación docente de su madre. Ella hizo un rescate del arpa, tristemente le tocó la partida, pero quedó el legado y hay 20 chicos que están estudiando arpa en la ciudad. El evento Misquila seguirá, la Provincia no quiere que se pierda.

– ¿Cuál era la meta de Isabel Neirot con el arpa?

– Ella quería demostrar que el arpa no era solo para Pájaro Campana. «Primero lo nuestro», desde siempre les dijo a sus alumnos, primero tocamos zambas, chacareras, gatos. En el tema de los luthiers de arpa está el problema, no hay en Santiago, queríamos fundar una Escuela de Luthería de Arpas para la región del Tucumán, al no tener luthiers propios se está trabajando con arpas estilo paraguayo. Lo importante es que se recuperó el legado del arpa e intentamos mantenerlo vigente. En 1921, en el Teatro Politeama de Buenos Aires, Andrés Chazarreta llevó el arpa con su orquesta.  Cuando se cumplieron 50 años del fallecimiento de Don Andrés se produjo una presentación en el Festival de Cosquín con una orquesta similar a la suya e Isabel fue, eso representó un gran orgullo para ella.

2 comentarios para “El legado de Isabel Neirot: pasado y presente del arpa santiagueña

  1. Me encanto la nota. Conocía Isabel en 2019 cusndo participé por primera vez en Mishquila de arpas. No la voy a olvidar. Felicito a Omar y a sus hijos por mantener vivo su legado

  2. Me encanto la nota. Conocí a Isabel en 2019 cuando participé por primera vez en Mishquila de arpas. No la voy a olvidar. Felicito a Omar y a sus hijos por mantener vivo su legado

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